martes, mayo 01, 2012




La noche pasea por la calle,
sus desgarros hurgan mi
                                   alrededor,
un sudor de miedo
se instala en mi garganta.


La gran ola espesa y dulzona
                                   como un desierto
avanza en mi cabeza.
Ha desaparecido el bosque,
ha desaparecido el cielo
                                  en la ciudad.


Aladas y negras siluetas
                                  sobrevuelan
como sombras navegantes,
rápidas quillas en el mar
viran buscan presas
                             distraídas.
Blancos accesorios son sus dientes
en busca de un refugio duradero.


Es madrugada, cesa el ruido,
lucen abandonadas las arterias,
cuerpos ya secos e invadidos
por un manto rojo
que cubre el espacio.


Ensoñaciones me recorren
esta primavera,
y desperté
con un sabor dulzón y espeso
en la garganta.
Roja era mi almohada,
mi nariz había roto
algún hilo del camino.



En esta primavera tan convulsa, tan de malas noticias, de tantos viernes de sobresaltos ... los sueños rojos me invaden y las camelias de mi terraza me suavizan.

20 comentarios:

Emilio Manuel dijo...

Creo que esas aladas y negras siluetas nos van a seguir persiguiendo durante bastante tiempo.

Un abrazo.

Toni Barnils dijo...

Nunca el temor puede vencernos. Ante la fastuosidad de la ciudad que todo lo engulle, quedará la fuerza de aquel mar, aquellos bosques y el deseo de estar, ni que sea para curar las venas de los demás.

besos

Ligia dijo...

Un bálsamo para las pesadillas son las flores. Abrazos

Francisco Espada dijo...

Tus camelias son bálsamo para los sustos semanales con los que hemos sido amenazados. Estamos desnudos; sólo la naturaleza, la irreductible naturaleza podrá salvarnos.

Maritza dijo...

Que las camelias siempre estén allí haciendo su labor,amigo.

El miedo es un sentimiento y una experiencia de vida (por haber decidido vivir) difícilmente evitable. Sin embargo se sale de allí. Todo cambia. Y ninguna oscuridad permanece demasiado tiempo a nuestro lado, afectándonos de la manera en que hoy afecta.

Unos abrazos llenos de luz y esperanza son los que quiero y puedo dejarte.

Besos!

lichazul dijo...

mi madre adoraba sus camelias y las cuidaba mucho...qué será de ellas ahora que ella ya no las cuida más? , qué será de ellas que se quedaron en la vieja casa en manos nuevas?

sueños y pesadillas en malva y es que la realidad nos zumba como abejas durante el día

encantador poema Gaia querida
besitos y abrazos pa'ti, feliz 1 de mayo

E. Martí dijo...

Besos enormes

Sarco Lange dijo...

Podría haber remedio, un sol que se apiade de los nogales. Y la certeza de que lo sabemos todo será un tatuaje de fuego en el medio de la frente.

Besos.

Samuel Rego dijo...

Habrá que dormir con la ventana abierta para que, entrada la bendita primavera, evite que nos persigan en sueños las pesadillas que preñan esta realidad tristemente actual

Un beso con un puñadito de primavera

Katy dijo...

Terminarán por soplar los vientos cálidos del verano.
Bss

Char dijo...

Nada dura para siempre, nada es más fuerte que la esperanza perfumada de camelias.

Buen miércoles, besos.

Sandra Figueroa dijo...

Hola Gaia, bellas letras amiga. Hermoso tu mundo. Cuidate.

fgiucich dijo...

Soñar es, muchas veces, fuente de inspiración para el poeta. Abrazos.

Lucía dijo...

Que las camelias sigan suavizando, junto a tu hermoso poema, esta primavera de sobresaltos...

Un hermoso poema, Gaia.

Besos.

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Aunque oscura sea la noche, siempre nos espera un claro amanecer.

Un abrazo.

Lady Blue dijo...

En momentos de gran confusión lo que nos queda es buscar dentro de nosotros mismos la paz necesaria que nos de la fuerza para mantenernos en pie y seguir avanzando pese a todo. Te dejo un cariñoso abrazo y agradezco la huella que has dejado en mi rinconcito!

Codorníu dijo...

Muchas gracias, Carmen.
Tus poemas me devuelven el eco de lo válido. Semillas que siguen dando fruto en quien las lee.

Un beso.

TORO SALVAJE dijo...

Sueños y camelias.
Eso es mano de santo.

Besos.

Anónimo dijo...

La primavera siempre provoca sueños especiales, no deja indiferente a nadie, para bien o para mal.

Saludos y gracias por tu saludo en mi casa

C Valente dijo...

A noite passa pela rua
belo poema
Saudações amigas e bom fim de semana